
En medio de un escenario económico complejo, el Gobierno Nacional ha actualizado su Plan Financiero para el año 2025. Esta hoja de ruta —que contiene proyecciones de gasto, ingreso y financiamiento— revela una estrategia marcada por la necesidad de enfrentar el deterioro fiscal y mantener los programas sociales, en un contexto de bajo crecimiento y recaudo insuficiente.
¿Qué implicaciones tiene este nuevo panorama para las empresas, contadores y tomadores de decisiones? En RMC analizamos los principales puntos y te compartimos recomendaciones prácticas para prepararte.
Déficit fiscal en aumento: ¿qué significa?
El Gobierno proyecta un déficit del 5,3 % del PIB para 2025, lo que representa una diferencia de más de $100 billones entre lo que se espera recaudar ($319,3 billones) y lo que se planea gastar ($420,4 billones).
Esto refleja la presión que enfrenta el país para financiar compromisos en salud, educación, pensiones y programas sociales, sin contar con los ingresos suficientes. El déficit es más alto del que inicialmente se había propuesto (4,4 %), lo que obligó a activar la cláusula de escape de la regla fiscal, permitiendo mayor flexibilidad en el corto plazo, pero a costa de mayor endeudamiento.
¿Cómo impacta esto a las empresas?
Un déficit fiscal sostenido puede traducirse en:
- Mayor endeudamiento del Estado, que presiona las tasas de interés del mercado.
- Ajustes tributarios futuros para cubrir los faltantes.
- Reducción de confianza de inversionistas internacionales, lo que afecta el entorno económico general.
Aumento del gasto público: prioridad en lo social
El gasto previsto para 2025 es de $420,4 billones, con prioridad en sectores como educación, salud y transferencias a hogares vulnerables. Esto responde a la promesa del gobierno de mantener el gasto social, incluso si eso implica sacrificar objetivos de ajuste fiscal.
Dato clave: El gasto se mantiene alto, pero el crecimiento económico proyectado no es suficiente para sostenerlo en el mediano plazo.
Presión tributaria: ¿vendrá una nueva reforma?
Uno de los puntos más sensibles del plan es el anuncio de una eventual reforma tributaria, para cubrir las necesidades fiscales de 2026. Aunque no hay un texto oficial aún, ya se discuten medidas como:
- Mayor control del gasto tributario, es decir, la revisión y posible eliminación de beneficios fiscales, exenciones y descuentos existentes.
- Aumento de retenciones en la fuente para ciertos sectores, como ya se está viendo con la industria extractiva.
- Fortalecimiento del control fiscal, especialmente desde la DIAN, para aumentar la eficiencia en el recaudo.
Relevante para tu empresa: Es probable que algunas deducciones o beneficios actuales desaparezcan o se vean limitados, por lo que anticiparse y revisar cómo afectaría esto la carga fiscal de tu empresa es clave.
Expectativa de ingresos: recaudo bajo la lupa
El Gobierno espera recaudar $319,3 billones en 2025, una meta ambiciosa en un entorno donde el crecimiento del PIB apenas se proyecta en 2,6 %. Sin reformas estructurales, ese nivel de ingresos solo puede alcanzarse con una mayor fiscalización y eficiencia administrativa.
¿Qué podemos esperar?
- Más revisiones tributarias.
- Cruces de información entre entidades.
- Solicitudes de correcciones o visitas más frecuentes por parte de la DIAN.
Recomendaciones para prepararte desde ahora
Desde RMC consideramos que este nuevo contexto exige que las empresas adopten una postura proactiva frente a la planeación financiera y tributaria. Estas son algunas acciones clave:
a. Evalúa tu planeación fiscal para 2025
Anticípate a posibles cambios en retenciones, anticipos y beneficios tributarios. Una revisión detallada del impacto potencial de una nueva reforma tributaria te dará margen de acción.
b. Refuerza los procesos contables y documentales
La fiscalización será más intensa. Tener soportes actualizados, procesos ordenados y registros precisos puede evitar sanciones o procesos innecesarios.
c. Cuida tu liquidez
El aumento de retenciones o anticipos tributarios puede afectar el flujo de caja. Considera este factor en tus proyecciones de efectivo y no esperes a final de año para hacer ajustes.
d. Asegura el cumplimiento de tus obligaciones
Un error menor puede representar un mayor riesgo en un entorno de control riguroso. Automatizar tus procesos contables o apoyarte en expertos puede reducir la exposición.
Oportunidad de actuar con inteligencia
La situación fiscal del país no es ajena a las empresas. Un entorno de alta presión tributaria y control fiscal exige preparación, análisis y acción informada. En RMC te acompañamos en este proceso, brindando asesoría estratégica para que tu empresa no solo cumpla con la norma, sino que también aproveche las oportunidades disponibles.