En abril de 2023, se observa estabilidad en el mercado laboral según los datos recopilados en el trimestre móvil que finalizó en febrero.
Este reporte realiza un análisis cuantitativo de algunos impactos del proyecto de ley de reforma laboral y examina los acontecimientos coyunturales del mercado laboral en ese periodo.
El informe indica que, si bien el empleo ha experimentado un crecimiento anual del 3,6%, lo que representa 768.000 nuevos puestos de trabajo, en los últimos meses la ocupación se ha mantenido relativamente estable.
Se destaca que la ocupación rural ha detenido su caída, mientras que la ocupación urbana ha dejado de crecer.
El empleo asalariado lidera la creación anual de empleo, aunque sus niveles se mantienen similares a los de enero, mientras que el empleo no asalariado muestra un ligero repunte.
La tasa de informalidad laboral ha experimentado un leve aumento, alcanzando el 57,4%.
Estos patrones de desaceleración también se observan en otras fuentes de información, como los trabajadores dependientes cotizantes a pensión y los afiliados a riesgos laborales y a cajas de compensación familiar.
Las vacantes y las expectativas de contratación muestran una relativa estabilidad, frenando el deterioro observado durante el último trimestre de 2022.
La tasa de informalidad laboral ha experimentado un leve aumento, alcanzando el 57,4%.
En cuanto al desempleo, la tasa de desempleo nacional se ubicó en el 11% en el trimestre móvil que finalizó en febrero.
Se espera que la tasa de desempleo nacional se mantenga entre el 9,8% y el 12,2% en promedio durante 2023, con un 11% como la cifra más probable.
Se proyecta una ligera tendencia al alza en la tasa de desempleo a lo largo del año, pero se espera que el mercado laboral se mantenga estrecho.
El informe también aborda el proyecto de reforma laboral radicado por el Gobierno Nacional en marzo. Se proporciona un análisis cuantitativo de las implicaciones de esta reforma en el mercado laboral.
Se estima que los cambios propuestos generarían incrementos en el costo laboral promedio, tanto en el componente salarial como en las indemnizaciones por despidos injustificados.
Se estima que el incremento en el costo laboral oscilaría entre 3,2% y 10,7% por el componente salarial, y entre 1,2% y 1,9% por el componente de indemnizaciones.
Además, se prevé que estos aumentos de costos salariales podrían recortar alrededor de 450.000 empleos formales en un horizonte de tres a cuatro años.
El impacto de los incrementos en los costos de despido podría manifestarse a más largo plazo.
El informe destaca que la reforma laboral propuesta tiene efectos heterogéneos en los distintos agentes y segmentos del mercado laboral. Si bien se han cuantificado los costos asociados a los cambios propuestos, no se han considerado los posibles beneficios para los empleados incumbentes, que se reflejarán en una mayor estabilidad laboral o de mejoras en el acceso al sistema de protección social.
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